La congestión u obstrucción nasal, es el resultado de la inflamación de los cornetes, que recubren la pared lateral de ambas fosas nasales. Esta inflamación se debe a un edema por liberación de vasoaminas de los vasos sanguíneos de la mucosa nasal.
El tejido nasal es un tejido eréctil que sufre cambios en su tamaño con mucha facilidad, y que tiene cambios cíclicos circadianos denominados ciclo nasal. Cuando la obstrucción es persistente puede ser debida a problemas alérgicos, hormonales, u obstrucción mecánica por pólipos, tumoraciones, cuerpos extraños, desviación septal, etc.
La causa más frecuente de congestión nasal es el resfriado común, el cual generalmente se acompaña de rinorrea, estornudos, odinofagia, y en algunas ocasiones de fiebre.
Otra causa frecuente es la rinitis alérgica perenne o estacional, donde la obstrucción se debe a la liberación de vasoaminas de las células cebadas de la mucosa nasal, ocasionada por el contacto con aeroalérgenos. Aquí el cuadro se acompaña de rinorrea hialina profusa anterior o posterior, prurito naso-ocular y estornudos en salva.
La obstrucción nasal también puede estar dada por sinusitis aguda, crónica o por la existencia de pólipos nasales. También algunos cambios hormonales como el embarazo y el hipotiroidismo pueden originar congestión nasal.
La congestión nasal, es el síntoma nasal más molesto, ya que impide el sueño reparador, ocasionando que el paciente se encuentre cansado y somnoliento durante el día, lo que origina problemas en el rendimiento escolar o en el trabajo. Muchos pacientes con este problema son etiquetados incorrectamente como déficit de atención.
Uno de los problemas más serios que ocasiona la congestión nasal es la respiración oral, lo cual puede llevar a alteraciones en la dentición, en la mordida y en el desarrollo del macizo facial, llevando a mal oclusión dental, dolor mandibular, dolor de oído y cefalea.
Muchos de estos pacientes tienen problemas ortodóncicos, que los hace usar aparatos de alineación dental; sin embargo, si el problema de la congestión no se resuelve, los dientes amontonados o desalineados, volverá a presentarse.
Es muy importante determinar la causa de la congestión nasal, para poder establecer un tratamiento etiológico. En el caso de la rinitis alérgica perenne o estacional, los esteroides nasales podrán ayudar a controlar los síntomas de rinorrea, obstrucción, prurito y estornudos. En el caso de sinusitis aguda y crónica, los esteroides favorecen el lavado y la ruptura del biofilm bacteriano de los senos paranasales; y al reducir el tamaño de los cornetes, prevendrán las recaídas. En el caso de la poliposis paranasal, los esteroides pueden usarse como coadyuvantes, acompañando al tratamiento con biotecnológicos dirigidos a deshacer los pólipos.
Existen muchos corticoesteroides para aplicación tópica nasal; entre ellos, la mometasona es el preferido, porque tiene muy baja biodisponibilidad. Esto lo hace el esteroide ideal en todas las edades, sobre todo niños pequeños y mujeres embarazadas. La gran ventaja del tratamiento tópico con esteroides nasales, es que permite usar una dosis pequeña de medicamento, que actuará en el lugar donde se aplica, fijándose a los receptores de la mucosa nasal, y dando así la mayor seguridad y eficacia con dosis diminutas.
Citas:
1.- Smith MM, Ishman SL. Pediatric Nasal Obstruction. Otolaryngol Clin North Am. 2018 Oct;51(5):971-985.
2.- Wang DY, Raza MT, Gordon BR. Control of nasal obstruction in perennial allergic rhinitis. Curr Opin Allergy Clin Immunol. 2004 Jun;4(3):165-70.
Dra Blanca Morfin
Médico cirujano egresado de la Universidad La Salle
Pediatra egresada del CMN “La Raza”, IMSS
Alergóloga egresada del Instituto Nacional de Pediatría
Maestría en Ciencias egresada de la UNAM
Académica numeraria de la Academia Mexicana de Pediatría
Miembro de COMPEDIA, CMICA, SLAAI
Fellow de la AAAAI
International member de EAACI
Extesorera de COMPEDIA
Exsecretaria del Colegio de Pediatras de la Ciudad de México